jueves, 22 de octubre de 2009

Por un puñado de coltan...

"El coltan (abreviatura de columbita-tantalita), una serie de minerales formados por la mezcla de ambos. De color azul metálico apagado, de él se extrae el tantalio que presenta una gran resistencia al calor así como extraordinarias propiedades eléctricas.
La República Democrática del Congo posee cerca del 80 por ciento de las reservas mundiales estimadas...
Según informes de agencias internacionales y de prensa la exportación de coltán ha ayudado a financiar a varios bandos de la segunda guerra del Congo, un conflicto con un balance aproximado de cuatro millones de muertos.
Rwanda y Uganda exportan actualmente coltan robado en el Congo a Estados Unidos, en donde se utiliza en la fabricación de elementos de alta tecnología como teléfonos móviles, reproductores DVD, consolas de video-juegos, etc.
La columbita y la tantalita están considerados metales altamente estratégicos, y al insistir en que ese 80 por ciento se encuentra en la Rep. Democrática del congo, se entiende por qué razón existe allí una guerra desde 1998, por qué sus vecinos, Rwanda y Uganda, ocupan militarmente parte del territorio congoleño y por qué han muerto esos cuatro millones de personas.
Y es que el coltan es un metal de igual modo esencial para el desarrollo de las nuevas tecnologías, las estaciones espaciales, las naves tripuladas que se lanzan al espacio y sobro todo las armas teledirigidas... De ahí la ocupación pura y dura de un territorio con el fin de aniquilar a sus ciudadanos y explotar sus recursos minerales.
Según un grupo de expertos de Naciones Unidas, el Ejército Patriótico Ruandés ha montado una estructura para supervisar la actividad minera en el Congo y facilitar los contactos con los empresarios y clientes occidentales. Traslada en camiones el mineral a Kigali, capital de Rwanda, donde es tratado en las instalaciones de la Sociedad Minera de Rwanda antes de ser exportado. Los últimos destinatarios son Estados Unidos, Alemania, Holanda, Bélgica y Kazaquistán...
Con la venta de diamantes ganaban unos 200.000 dólares al mes. Con el coltan ganan más de un millón..."
Voluntarios u obligados, miles de trabajadores congoleños cubiertos de polvo de los pies a la cabeza se afanan rebuscando sin más ayuda que las manos hasta encontrar lo que parecen diminutas piedras de un color azul grisáceo... Por un euro al día!!!
Y para la extracción utilizan a muchachos, casi niños, que se introducen a gatas por estrechos agujeros cavados en los taludes de las lomas. Cubiertos de polvo, famélicos y con los ojos enrojecidos parecen un ejército de fantasmas... Por veinte céntimos al día!!!
Alberto Vázquez-Figueroa describe de esa manera el drama de una región.
La miseria, la injusticia, la opresión, la muerte la han ido extendiendo... por un puñado de coltan.
Rwanda sufrió en la carne de los más humildes, sobre todo, el odio racial, la ambición del poder y del dinero.
Ahora, los mismos "ganadores" de la primera guerra clavaron sus garras en esa otra presa vecina: el Congo y sus minas.
Aunque conviene no olvidar a los verdaderos explotadores: las empresas y países que incentivan y pagan esos minerales... sin importarles los millones de personas que puedan morir.
Por un puñado de coltan.

lunes, 12 de octubre de 2009

A la intemperie


"Dormir al raso o a la intemperie" quería decir al descubierto, fuera de las murallas...
Y hoy me gusta más sentirme así: como el que vive y duerme a la intemperie, en medio de lo ocurre a la gente, en medio de los problemas de la vida de la gente corriente.
Y se me ocurrió eso estando en misa. Sí! en la iglesia.
Siento que nuestra iglesia oficial se ha refugiado en las murallas de su dogma, de su doctrina infalible, de sus ritos y ceremonias olvidándose de lo que pueda pasar afuera. Tiene la "verdad", son "representantes" de Dios (el de verdad, el Todopoderoso), posee la doctrina segura, conoce el camino... Qué importa todo lo demás?
Y, oficialmente, abomina del "laicismo" imperante y condena el secularismo que todo lo invade.
¿Querrá decir que ahora los "laicos" empiezan a contar para algo?
¿Significa eso que las "cosas del siglo" tienen alguna importancia?
Ya me gustaría; pero en las mentes de los que mandan en la Iglesia (al menos en la católica), los laicos sólo son eso: laicos = el escalón de abajo, los que obedecen, los que escuchan, los que tienen que decir "Amén".
Es tan clerical esta iglesia que los obispos, curas y demás siguen actuando como "dueños y señores" de su territorio, "maestros y doctores" con título divino que tienen respuesta a todas o a casi todas las preguntas.
Y así no se puede formar una comunidad de hermanos.
Entonces resulta mejor "dormir a la intemperie", fuera de esas murallas... intentando seguir al único al que reconocemos como "Maestro", a Jesús de Nazareth.

domingo, 27 de septiembre de 2009

Todo un espectáculo


Como comentaba mi amigo Manel, ya terminó el verano. Ya se fue el calor y parece que, poco a poco, todo el mundo vuelve a su ritmo normal, a su rutina, a los caminos trillados de cada día...
Bueno, los hay que seguimos con el ritmo que la edad y el status de "jubilado" nos concede.
Yo sigo "contemplando" desde mi ventana.
Y todo este tiempo del verano ha sido excepcional. Gentes que van y vienen. Personas que desearían atrapar el tiempo y detenerlo para saborearlo más lentamente. Gentes que se sienten insatisfechas incluso en vacaciones. Personas que necesitan mantener la velocidad para que parezca que así tienen más, disfrutan más, le ganan al tiempo incluso.
Para mí, desde mi ventana (esté donde esté), me encanta contemplar la vida.
Una vida con tantísimos detalles.
En grandes y pequeños.
En gente jóven y en gente mayor.
En los niños y en los ancianos.
En la naturaleza: en el mar o en la montaña, en el cielo, en las nubes, en la lluvia o en el día soleado.
Qué regalo más grande!
Sí, es cierto, pasa como un soplo; pero qué regalo!
Por eso, siempre que puedo me paro a "contemplar" y mirar desde mi ventana. Ante todo, mi propia vida. Sin prisas. Sin querer precipitarla. Cada momento es especial y único.
Y doy gracias. A Dios, a la naturaleza, a la vida misma...
Y a los que me rodean.

martes, 7 de julio de 2009

Todos los caminos...

Ultimamente se han acumulado las noticias en mi pantalla. Son noticias de amigos, de conocidos, de personas que, a través del ordenador, nos hacen llegar muchísimos detalles de la vida.
Tantos caminos!
Maneras de vivir, de saborear la vida, de compartirla, de darla incluso.
Voluntarios que brindan su tiempo y su vida en favor de gentes necesitadas.
Jóvenes y no tan jóvenes que a través del Teatro descubren la amistad, la solidaridad, otras causas y otras motivaciones para su vida.
Personas, especialmente mujeres, que sin perder la sonrisa y con una dedicación exhaustiva hacen que la familia siga adelante.
Sacerdotes que, más allá de lo que la Jerarquía y la doctrina oficial predica, mantienen las maneras de Jesús de Nazareth y ponen especial cuidado en los pequeños, en los humildes, en los más desfavorecidos.
Un gran número de "padrinos" que han escuchado hablar de la gran carencia de un colectivo de niños enfermos -de esos que no tienen ningún interés para el mundo: parálisis cerebral, trastornos profundos, retraso mental...- y se comprometen a cuidarnos buscando las medicinas que puedan necesitar.
Y la sensación de impotencia ante la violencia de género... Hay una amiga que vive en Rep. Dominicana que sabe mucho de eso. Y sus esfuerzos, sus publicaciones, sus apoyos y atenciones en su consultoría es uno más de los muchos caminos que me van descubriendo...

Y entiendo que por ahí anda Dios. Y todas esas personas son "dios" enderezando entuertos. Cada uno de ellos se convierte en "dios" repartiendo y compartiendo lo mejor de lo mejor: el amor y la solidaridad. ¿No dice San Juan que Dios es amor?

Amig@s, conocid@s, compañer@s, personas cercanas o lejanas que nos ofrecéis las "maravillas" de vuestro camino: Muchas gracias.
A ver si yo mismo soy capaz de vivir como vosotr@s.

jueves, 21 de mayo de 2009

Entender para amar...


Es un pensamiento que me persigue todos estos días.
Si no entendemos a las personas, a los que nos rodean, a los de lejos y a los de cerca, si no sabemos de ellos... no llegaremos a quererlos.

En un librito que estoy leyendo en estos días ("Círculos de tiza" de Jorge Berenguer Barrera), me encontraba con esta frase: "Las personas lo son todo, Mario. El mundo estaría hueco sin ellas, y es importante que las entiendas si pretendes llegar a amarlas".

Los miércoles y jueves colaboro con la ONG Karibú (acogida y atención a los inmigrantes africanos). Alfabetización, clases de conversación, etc. Personas africanas, llegados en pateras la mayoría, con unas historias increíbles. Han llegado hasta nosotros esperando encontrar el "cielo" y se topan con una realidad dura y cruel...
Y me doy cuenta de que sólo tratando de entenderlas seré capaz de quererlas, de ayudarlas, de compartir con ellas.

Y por eso me alegro y me maravillo de saber que hay tantas personas que viven y se esfuerzan para que todo esto cambie. Grupos y organizaciones que nos transmiten conciencia y conocimiento para que entendamos, para que podamos llegar a querer y amar... especialmente a los más débiles y desfavorecidos.
Y voy a citar sólo a los que tengo más cerca:
Mª Luisa, lleva trabajando en Karibú desde 1991 (alfabetización y acogida)
Teresa, Consuelo (misioneras de Africa con muchos años de experiencia en Africa) ahora ya jubiladas son acogedoras y trabajadoras con todas estas personas que llegan a Karibú.
Amador, Miguel, José Antonio, etc. profesores de alfabetización y voluntarios en este esfuezo de apoyar a nuestros viajeros de patera...
Y algo más allá: Los voluntarios de Concordia, con todas las noticias que nos llegan desde Mallorca, de acá de Madrid, de Navarra, de Valencia, de Barcelona...
Y quiero destacar de manera especial al Centre de Música y Dança de Valencia... con tantas personas implicadas y que tanto se esfuerzan en esa labor de hacernos entender... para querer y amar a esos desfavorecidos de la tierra.

A todos ellos, mi agradecimiento más sentido en nombre de todos.

sábado, 25 de abril de 2009

"Celebramos la muerte del Señor..."


Cómo me llama la atención esa frase que usa San Pablo!
Cuando nos reunimos y partimos el pan celebramos la muerte del Señor...
Y me pregunto si lo entiendo bien.
Vamos a la celebración. Compartimos el pan de la Eucaristía. Oramos y recordamos a nuestros antepasados difuntos...; pero "celebramos la muerte"?

En las notas que he leido sobre las normas o estatutos de los Laicos Misioneros de los Sagrados Corazones se habla de "servir al Traspasado en los traspasados"...
Y contemplando al Traspasado, vuelvo a preguntarme sobre esa celebración de su muerte.
Y a los traspasados (con minúscula) lo encuentro todos los días. Para muchos de ellos la vida que llevan se parece a una "muerte".
Estoy recordando a Ahmed, a Osman, a Ike Okejuku, a Pulla, a tantos... Los miércoles y los jueves por la mañana me los encuentro en las clases de español en Karibú (ONG). Son de Mauritania, de Togo, de Nigeria, de Gambia, etc. ¿Cómo han llegado hasta nosotros? Todo un viacrucis. Y no tienen papeles, no saben español, no tienen trabajo, sobreviven con la ayuda de la Cruz Roja, de Karibú, de buenas gentes...
Son unos "traspasados". Viven y mueren día a día.
¿Tengo que celebrar su "muerte"?
¿Acaso quiere decir que con su muerte algunos de nosotros estamos pasando a una vida diferente? Será que ellos nos abren los ojos como a los discípulos de Emaús?
Porque cómo va a querer Dios su miseria, su pobreza, su muerte! Si Dios, nuestro padre, quiere que vivamos y tengamos vida en abundancia... no será que tenemos que descubrir ese nuevo estilo de vida?
Y al abrir los ojos comprenderemos que al llegar a ese nuevo nivel la vida de Dios entra en nosotros, nos cambia, y comenzamos a celebrar algo que resulta absurdo para unos, necio para otros...
De esa manera, al acercarme a estos inmigrantes creo que empiezo a entender algo de esa "celebración de la muerte del Señor".

domingo, 12 de abril de 2009

Celebrar la Pascua

Muchos celebramos la Pascua.
De muchas y de muy diversas maneras.
Procesiones, Conciertos, Oraciones, Encuentros, Retiros, Horas Santas...
Tantas manifestaciones y tan diferentes como lo es la manera de entenderla.

"Resucitó el Señor!"
¿Una victoria sobre la muerte que vence nuestro miedo a morir?
¿Los buenos que ganan a los malos?
¿Que, por fin, se van a enterar?
¿Que nuestro dios es mejor y más grande?

Supongo que los primeros cristianos moverían la cabeza y sonreirían al mismo tiempo.
Y Jesús, con su gran pasión por el Reino y su debilidad por los más humildes, ¿entendería lo que hacemos?

Los amigos de Argentina y del Caribe me han enviado su felicitación Pascual. Me siento bien con sus deseos, con su estilo, con su manera de entender.
Y el amigo Cándido, en su mensaje, me insiste en que tenemos que "ir a Galilea"... ¿Es un mensaje en clave?
Cuando en el evangelio se les dice a aquellos hombres y mujeres que... "no está aquí... Volved a Galilea, allí lo encontraréis..."
No será que nos quedamos mirando al cielo (con procesiones, ángeles, vestiduras y adornos)... y nos dicen: vuelve los ojos a tu alrededor. El Reino ya ha llegado. Abre los ojos y comienza a vivir de una manera nueva. La vida nueva (el estilo de Dios) que nos han regalado y que tenemos que transmitir antes de volver a nuestra fuente, Dios mismo.
Y cuando lleguemos a ese final, habremos vencido a la muerte. Ya no habrá miedo porque estaremos volviendo a nuestra propia casa, Dios mismo.

Por todo eso, gracias a los amigos que me ayudan a celebrar la Pascua y me ofrecen motivos de reflexión y "vuelta a Galilea".

Un abrazo a todos. Y "feliz Pascua de Resurrección".

Dios no mandó su hijo al mundo para condenar...

...sino para se salve por él 14 de septiembre 2025 (Fiesta de la Exaltación de la Cruz) El texto que nos ofrece este fin de semana la Iglesi...