miércoles, 5 de noviembre de 2025

"Quitad esto de aquí...

...No convirtáis en un mercado la casa de mi Padre.»

9 de noviembre 2025

El texto del evangelio de Juan nos presenta una escena que siempre ha dado mucho que hablar y comentar: "La expulsión de los mercaderes del templo...". Ovejas, bueyes, cambistas, vendedores de palomas...

Una escena que nos es totalmente ajena y que no tiene fácil comprensión. El culto del templo de Jerusalén se basaba en la ofrenda de animales (que luego se sacrificaban); también era necesario el cambio de moneda (ya que en el templo las ofrendas se debían hacer en la moneda judía)... Todo ello suponía un negocio increíble para los que gestionaban la administración del Templo.
Posiblemente en el fondo de la cuestión estaba en que el culto a Dios (el Dios de nuestros padres Abraham, Isaac y Jacob) terminaba centrándose en dichas ofrendas y quedaba muy lejos de lo que Jesús sentía y creía que debía ser el verdadero culto a Dios...

Basta recordar el diálogo con la samaritana: "J
esús le dice que se acerca un tiempo en que la adoración no dependerá del lugar, sino de la actitud del corazón. Adoración en espíritu y verdad: El mensaje central es que los verdaderos adoradores se conectarán con Dios a través del espíritu  y serán sinceros en su fe, independientemente de su ubicación física..."
También en su encuentro con Nicodemo. Jesús le habla de "nacer de nuevo"...
Son detalles que nos hablan de la manera de entender Jesús la relación que se debía tener con Dios.
Finalmente se llegaba a la conclusión de que, para Jesús, tanto el Templo como la Ley, eran muy relativos y no eran lo más importante a la hora de encontrar a Dios y vivir la vida de hijos-hijas de Dios.

Y es que escuchar ese texto del evangelio de Juan y aplicarlo a nuestra vida viene a ser y tener el mismo mensaje que tanto molestó a los Sacerdotes, Letrados y Fariseos de su tiempo. De nuevo nos plantea nuestra relación con Dios, nuestro padre. ¿En qué la hemos convertido? ¿Qué significa para mí? ¿Es el cumplimiento de la Ley? ¿Asistir a la iglesia los domingos y días de fiesta?
En otras palabras, mi vida, mis actividades, mis actitudes, mi lenguaje y mis opiniones ¿son las de un hijo de Dios? 
Mi oración (mi encuentro con el Señor) ¿se reduce a las que rezo en la iglesia? ¿Se reduce a oraciones hechas, a repetir algo aprendido en la catequesis? ¿Intento, a lo largo del día, tener momentos de conectar con la vida de Dios?

"-No convirtáis en un mercado la casa de mi Padre."

Mi relación con Dios no debe ser para conseguir algo, para ganar nada, para congraciarme con Él, ni siquiera para pedirle perdón... No, mi relación con él me hace ver y entender que sólo soy humano; que me equivoco a menudo y cometo errores, que soy débil...; que estoy lejos de alcanzar esa humanidad que Él espera de mí. Eso está clarísimo.  Y sé que Él me conoce mejor que yo mismo, me comprende y me perdona... Y, en mi encuentro con Él, me pongo en sus manos, me fío de Él y sé que en medio de mi actividad diaria voy de camino hacia Él que es el origen, raíz y fuente de toda vida. Y mi deseo es que su vida se haga cada día más evidente en mí.


Texto del evangelio de Juan 2,13-22

Se acercaba la Pascua de los judíos, y Jesús subió a Jerusalén.

Y encontró en el templo a los vendedores de bueyes, ovejas y palomas, y a los cambistas sentados; y, haciendo un azote de cordeles, los echó a todos del templo, ovejas y bueyes; y a los cambistas les esparció las monedas y les volcó las mesas; y a los que vendían palomas les dijo:
«Quitad esto de aquí; no convirtáis en un mercado la casa de mi Padre.»

Sus discípulos se acordaron de lo que está escrito: «El celo de tu casa me devora.»

Entonces intervinieron los judíos y le preguntaron:
«¿Qué signos nos muestras para obrar así?»

Jesús contestó:
«Destruid este templo, y en tres días lo levantaré.»

Los judíos replicaron:
«Cuarenta y seis años ha costado construir este templo, ¿y tú lo vas a levantar en tres días?»

Pero él hablaba del templo de su cuerpo. Y, cuando resucitó de entre los muertos, los discípulos se acordaron de que lo había dicho, y dieron fe a la Escritura y a la palabra que había dicho Jesús.

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...No convirtáis en un mercado la casa de mi Padre.» 9 de noviembre 2025 El texto del evangelio de Juan nos presenta una escena que siempre ...